¿Qué funciones tiene un Auxiliar de Medicina Estética?

Inesbe

Medicina Estética

Tabla de contenidos


En la era de la comunicación, las redes sociales y los mass-media ejercen una potente influencia en nuestras vidas. Ante estos mensajes multimedia de culto a la imagen, nos mostramos vulnerables y tenemos la imperiosa necesidad de ser aceptados. Es por ello que, en los últimos años, ha aumentado considerablemente la demanda de tratamientos estéticos.

Cada vez son más las personas que acuden a los centros de estética en busca de mejorar su apariencia física y, por ende, su autoestima. Pacientes que desean verse y sentirse bien, tener un aspecto saludable, y que solicitan servicios relacionados con la Medicina Estética.

En esta vorágine de procedimientos estéticos disponibles en el universo beauty, los favoritos continúan siendo los métodos no invasivos, por encima de las cirugías que implican mayores riesgos y costes más elevados.

Este aumento de la demanda conlleva a la proliferación de más clínicas especialistas en estética y belleza que, a su vez, generan mucho empleo. Si bien, se necesitan profesionales cualificados, como los técnicos auxiliares, que sean capaces de abordar con solvencia las labores de asistencia médica.

¿Quieres saber cuáles son las labores de un auxiliar de medicina estética?

¡Te las detallamos a continuación!

Asistencia al médico especialista

Servir de apoyo al profesional es una de las tareas esenciales de este puesto, ayudándolo en la aplicación de los diferentes tratamientos estéticos al paciente. Es por ello que este perfil profesional requiere de una formación adecuada en las últimas tendencias en aparatología estética. 

Preparación de productos y herramientas

Tener lista la cabina antes de los diferentes tratamientos, así como los cosméticos, utensilios y dispositivos necesarios para llevarlos a cabo, es otra de las funciones del auxiliar de medicina estética que, además, deberá preocuparse de la correcta limpieza de la sala y el material.

Para ello, debe estar instruido en materia de higiene y bioseguridad con el fin de proteger la salud de los pacientes y del equipo humano que trabaje en el centro. Las medidas de asepsia y antisepsia, así como una buena gestión de los residuos, son fundamentales para evitar la transmisión de enfermedades. 

Aplicar ciertos tratamientos 

El técnico auxiliar debe estar capacitado para llevar a cabo, con éxito, determinados procedimientos estéticos y pruebas complementarias a dichos tratamientos; obteniendo los resultados esperados por el paciente. 

Atención personalizada al paciente

El auxiliar de medicina estética tiene contacto directo con el paciente, convirtiéndose en su gran aliado. Es la cara visible de los gabinetes de estética, por lo que debe entrenar sus habilidades sociales y comunicativas; debe ser empático y cordial, siendo capaz de informar adecuada y honestamente a los clientes, resolviendo sus dudas y cuestiones. Asimismo, tiene la obligación de conocer diferentes técnicas de venta de productos y/o servicios. 

Realizar labores administrativas

El técnico auxiliar también se encarga de la gestión de la agenda médica y las citas de los pacientes, así como de la realización de los pedidos y el control del stock. Pero, si hay una labor importante, es la de cumplimentar la documentación de protocolo, teniendo siempre en cuenta las obligaciones recogidas en la Ley Orgánica de Protección de Datos y Garantía de los Derechos Digitales.

Cuando se realiza un servicio estético, por pequeño que parezca, es importantísima la firma de un consentimiento informado que nos ofrecerá un respaldo legal; se trata de un documento que refleja al detalle que el paciente ha sido convenientemente informado y ha entendido los riesgos, beneficios y alternativas de un determinado tratamiento, así como las recomendaciones y cuidados posteriores. 

Asimismo, el auxiliar de medicina estética rellenará un historial clínico sobre el estado de salud del cliente, que recoja cualquier posible patología, como una alergia o problema de salud, que pueda condicionar el resultado del procedimiento e, incluso, contraindicarlo. En el sector de la estética, esta anamnesis es fundamental. 

En definitiva, se trata de una profesión en auge que cuenta con un amplio abanico de salidas profesionales, pudiendo ejercer en clínicas de medicina estética, centros de belleza, balnearios y spas, gabinetes de nutrición y dietética, entre otros.